Yo lo que quería era escribir.
Pero la vida te va liando y liando, y no se sabe como, de repente una se ve justo en el lado opuesto de en dónde pensaba verse. Y todo porque lo decidí así. Cada decisión me ha ido encaminando hasta este punto. Aquí y ahora.
Hasta que alguien te recuerda lo que quisiste una vez, y entonces te sorprendes de tus propias incongruencias.
Pero no hay que dar nada por imposible. Habrá que alargar al máximo los brazos para poder abastarlo todo, y lo juro: un día doy el pelotazo.
O de ilusiones se vive.
A mí no siempre me quedará París (porque París ni me va ni me viene, por muchas ganas que tenga de ir), pero me quedará una librería secreta.
5 comentarios:
Firmo la primera línea que has escrito. Firmo tener brazos largos que ocupen todo. Yo queria escribir y voy y me hago mago...
A mi me queda un árbo partido por la mitad. Una luna en Cadiz, una casa en Asturias una bahía en cataluña y nada más.
La vida es larga, muy larga, no es cierto que las oportunidades pasen, vuelven una y otra vez, ya lo veras…
Un saludo.
Ojalá tt tenga razón y no me cabe duda de que illa tiene mucho que contar. Por ahora nos conformamos con tu blog -que no es poco!
Creame, señorita, nunca es tarde para escribir... Se puede hacer tarde para el rock & roll, pero no para escribir. Yo tengo diez años más que tú y todavía estoy en ello, así que... Cuanto más mayor te haces, más cosas sabes y más puedes contar. Ánimo! ;)
Oh! Con tantos puntos de vista optimistas cómo echarme para atrás!!
Así da gusto! Brindemos porque pasen los años, vuelvan las oportunidades, sepamos más, tengamos más cosas que contar y así demos el pelotazo!
PD: Jo Zifnab, ¡sí que te quedan cosas! Y la casa en Asturias..¿en qué parte?:P
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