martes, octubre 19, 2004

Ojalá

Hoy me he puesto el despertador a las 8. Tengo que llamar a la formación para avisar que hoy no podré ir. Ni a clase, ni a la entrevista. Tengo que ir al médico.
Parece que las "desgracias" nunca vienen solas, menuda gran verdad.
Estas noches apenas duermo, me acuesto sobre la 1, y me quedo leyendo hasta perder la noción del tiempo. Quizá sean las 2, las 3.
Además leo un libro que no me gusta, que me intranquiliza. Es un tanto desagradable. Entre culebrón de tele y folletín de mal gusto.
A las 9 me despierto, y si pongo el despertador, soy incapaz de volver a dormir. Hoy a las 8 ya deambulaba por mi casa, fría y vacía. Bueno, nunca he sido capaz de volver a dormir.

Me gustan las mañanas, pero no la de hoy. No las que ya son frías, y en las que te levantas con el estómago revuelto y un mal sabor de boca. Ni siquiera me apetece el desayuno, mi comida del día preferida.
Despeinada, sumida en el desorden de mi habitación..quizá si me pongo algo de música y ordeno a conciencia me anime. Es lo que necesito.
Este domingo tenía planes que me animarían, pero al final no pudo ser, y eso acabó por hundirme. Hoy, martes, vuelvo a alzar la mirada hacia arriba, y a intentar levantarme poco a poco. Pero muy poco a poco, no vaya a volver a caerme antes de estar de pie de nuevo.
No sé cuanto tiempo me llevará. Ojalá las buenas noticias vinieran a mi encuentro de repente. Eso lo cambiaría todo.
A lo mejor, tener que anular la entrevista no ha sido coincidencia, quizá me llamen esta semana de otro sitio, y sea mejor así.
Quizá. Ojalá. Espero. Deseo. Que las nubes desaparezcan, que vuelva el color rosa a mi vida.

3 comentarios:

Serdodebarna dijo...

No soy el más indicado para decirlo, pero las cosas (tanto para bien como para mal) pasan cuando menos te las esperas. A lo mejor mañana, a lo mejor pasado, o a lo mejor dentro de dos minutos sucede algo que te haga sacar la cabeza del pozo donde estás metida.

Y con la cabeza fuera podrás ver la cuerda a la que agarrarte para acabar de salir, y cuando estés fuera me invitarás a una caña porque eres una tía mu maja y sabes que me la merezco, aunque sea lo puto peor.

illa dijo...

Jaja, de puto peor nada, la personificación del puto amor es lo que eres;).
Te prometo que cuando tenga buenas nuevas (tarde lo que tarde) no sólo te invito a ti a una caña, sino que además habrá que hacer quedada oficial, a la que sí iré:P, dónde lo celebraremos por todo lo alto!

Serdodebarna dijo...

Lo de la quedada lo podemos dejar a un lado, pero de la caña no te libra ni karreroblanko en cómodos plazos!!