Hace casi una semana que trabajo de dependienta en El Corte Inglés. En la sección moda mujer. Y la verdad es que hay cosas chulas:).
Pero los primeros días todo se me hizo una montaña. Tenia muchas cosas que aprender, que no sabía hacer. Me sabía mal por las clientas, las compañeras, los jefes...Pero parece que poco a poco voy mejorando, y aprendiendo :). En realidad no es un trabajo aburrido, pq a pesar de no haber demasiada clientela (parece ser que he ido a parar al Corte Inglés menos concurrido..) siempre hay cosas que hacer: traspasos, ordenar, buscar o dejar cosas en el almacén..etc.
Por cierto que he subido bajos y todo!! Yo que no he hecho nada de eso en mi vida! jaja. Y la gente alucina cuando les cuento que doblo la ropa y todo, con lo desastre que soy yo siempre xd.
Pero lo que peor llevo es meter la ropa en las bolsas, esas de plástico resbaladizas XD No sé que pensarán las mujeres cuando me ven pelearme de esa manera con una simple bolsa pero bueno...todo será la prática! Nunca fui demasiado mañosa y hay cosas que nunca cambian.
Como poniendo alarmas. ¡La de veces que me he pinchado! Y la de veces que las he colocado mal..pero bueno.
Es entretenido pero es agotador, mucho más cansado de lo que parece desde fuera. Y es que me tiro algo más de 7 horas de pie, y sin descanso. Yo que he sido sedentaria desde siempre. ¡Menudo cambio! Me hacen daño los zapatos de descanso 24 horas (van a ser mis pies y no el calzado los culpables) y las tiritas no solucionan nada.
Y eso que aún no he visto un fin de semana activo, porque en Navidades alucinaré, seguro.
Y tiene más cosas malas. Todas las empleadas parecen asustadas por la vigilancia de los jefes. Que sí, muy majos, pero no sé porqué se respira este miedo a estar parado y que te vean, o charlando, o a llegar tarde...¡Menuda paranoia!
Y me da la impresión de estar en una especie de internado durante esas siete horas.
Entramos por una puerta de personal, cuando aún queda hora y media para que se abra el centro. Todo son escaleras y laberintos oscuros. En los vestuarios hay que cambiarse corriendo, al menos yo, que siempre voy con el tiempo justo..Y a subir a mirar los carros con nueva mercancía. Los tenemos que buscar, ordenar, quitar los plásticos, alarmar...
Hoy me he quedado sola alarmando..y dada mi lentitud, a las 10 aún no había acabado ni de coña!
Luego ya cada una va a su sección..y a ordenar todo. Nueva ropa, búsqueda de tallas, hacer traspasos..van llegando clientas a recoger compras, que les arreglemos algo...Ventas pocas. Muy pocas, al menos de momento.
Y compañerismo sí, mucho, y me ayudan en cualquier cosa. Pero mi compañera de esta semana ya me la quería colar: primer día y ya me suelta que si me parece cada una se encarga de un departamento (ella del de más ventas, claro) y lo llevamos por separado.
Ya ves, para la miseria de comisión que hay, y para las ventas que hay tb..
Yo hice caso omiso. Pero luego me fijé y bien que puso su número cuando cobró algo de "mi sección". Así que nada, yo a lo mio y cobro lo que atienda. Igual que me parece genial que ella cobre lo que atiende, faltaría más. Pero me da mucha rabia que la gente vaya así. Son el tipo de cosas que me incomodan muchísimo. Porque yo jamás lo he hecho ni lo haría.
Como un jefe, que se me acerca un día para decirme que atienda a una clienta. Cuando la mujer sólo miraba y por supuesto, no compró nada.
No sabré hacer muchas cosas, pero sé cuando alguien está interesado en comprar y cuándo no.
Nosotros tampoco podemos usar los ascensores. Debe crear mala imagen. Y nuestro comedor (lleno de máquinas vending), me recuerda a las escenas carceleras de las películas. Dónde todos con su uniforme se sientan en esas sillas grises y mesas blancas..y a comer bocadillos o de fiambrera.
No me gusta. En esos momentos me vuelvo a sentir en un internado.
Y no me parece estar en El Corte Inglés que conozco como cliente. Únicamente veo la ropa que está mal colocada, la que hay que ordenar, las perchas que hay que cambiar, ayudo a los clientes..pero se hace todo automáticamente. No se disfruta. O al menos yo no disfruto.
Por lo menos he descubierto que este trabajo no me gusta. No me quiero dedicar a esto. No me sentiría realizada para nada.
Y allí no lo digo, claro, porque es el trabajo de mucha gente, es de lo que viven, y a muchos les gusta y disfrutan. Pero simplemente, yo tengo otras preferencias.
No dejo de compararlo con el trabajo en la agencia y la verdad...prefiero mil veces antes lo otro a esto. El orgullo del trabajo realizado no tiene ni punto de comparación. Tienes libertad para tomar un café cuando quieras en la cocina (faltaría!), no fichas, vas a lo tuyo en tu mesa, con tu ordenador...Mientras hagas bien tu trabajo, seas responsable y trabajes bien en equipo..en lo demás no hay tanta rigidez, tanto control.
Y no trabajas sábados ni festivos, aunque trasnoches a veces :p.
Creo que este trabajo tb me ayuda a madurar,ver lo que es un trabajo de verdad (de una vez, ya era hora no?:P) a darme cuenta de lo privilegiada que he sido hasta ahora (y eso que no estoy en una fábrica), y, bueno..me dan muchas más ganas de encontrar trabajo pero YA! XD Estoy enviando cv como una loca, aunque de momento nada. También me quiero colegiar.
En fin tengo tantos planes y realizo tan pocos....
Pero creo en la fuerza de los deseos (porque muchos se me cumplieron, incluso por puro azar). Y yo deseo estos cambios con todas mis fuerzas. Espero que se cumplan.
1 comentario:
Todo comienzo requiere un tiempo de adaptación, es normal, no te preocupes y ve poco a poco, que seguro que lo estás haciendo de maravilla. Respecto a lo negativo, por desgracia se ve en la mayoría de los trabajos de ese estilo, tu sigue siendo como eres y que cada palo aguante su vela. Ya verás como pronto encuentras algo de lo tuyo. Sobre todo sigue luchando por lo que quieres.
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