viernes, diciembre 31, 2004

Después de la impotencia...

Sé que he deseado unas felices fiestas a mucha gente. Y de verdad lo deseo. Pero es muy difícil entrar con alegría en este nuevo año cuando el 2004 no ha sido un año nada feliz para el mundo.
No nos bastó con el 11-S del 2001 ni con tantas otras desgracias acaecidas. Además, en España hemos tenido nuestro 11-M particular..(¡malditas fechas señaladas, si todas lo van a ser por estas razones!) y aún tenemos nuestro grupo terrorista particular. A parte, por supuesto, integrantes del grupo terrorista más temido actualmente a nivel internacional conviven con nosotros sin nosotros saberlo, y no dejan de llegar pateras a nuestras costas repletas de gente a la que apenas ayudamos..cuando llegan.

Un panorama muy desagradable para terminar el año. Y ya nos parecían excesivas desgracias juntas..cuando la fuerza de la naturaleza arrolla mediante un enorme maremoto en el Índico a miles de personas.
Imágenes y cifras desoladoras, impactantes, increíbles..Y una abrumadora tristeza y sentimiento de impotencia que lo ocupa todo.

Pensando en todo lo sucedido durante este año pasado..que queda sino alegrarse de que por fin llegue a su fin, y desear con todas nuestras fuerzas que el 2005 que comienza sea totalmente diferente.
Que seamos más solidarios, que acabe la violencia, la prepotencia, el egoísmo... Que baje del poder quién merece bajar, que recoja lo que siembra quién de verdad lo merece, que acaben las injusticias, que las ideologías no nos separen, que la pobreza desaparezca, que los ricos..lo sean menos..Y que tratemos todo lo bien que se merece a nuestro preciado planeta, y esperemos que él haga lo propio con nosotros.


1 comentario:

Isthar dijo...

Siempre he pensado que si sonries a la vida, la vida te devuelve la sonrisa. Pero ni tengo claro que sea así, ni mucho menos que la gente tenga intención de sonreir... y de hacer algo ni hablamos...