viernes, enero 14, 2005

Promises

El otro día vi el documental coproducido por Israel-USA Promises, de Justine Saphiro, B-Z- Goldberg y Carlos Bolado y rodado durante los años 1997, 1998 y 2000.
En el documental B.Z. viaja a través de las comunidades palestinasl y los barrios de Jerusalén, y pone en contacto a niños palestinos e israelíes, judíos y árabes, de edades comprendidas entre los nueve y los trece años.
Lo que más me impactó..fue ver a niños de 9 y 12 años hablar como adultos y repetir como loros lo que seguramente habían escuchado de sus padres. Hablar friamente de la necesidad de matar, de la crueldad de los demás, de la muerte de sus familiares y amigos, a la que se enfrentan día tras día. Y ver la desesperanza en sus ojos. La desesperanza y la falta de ilusión por un futuro mejor.
Niños lleno de prejuicios, educados en el rencor y el odio, en el fanatismo incontrolado..y que encuentran en esta educación la principal barrera al cambio de las cosas. Tienen miedo a relacionarse con el "otro bando" porque se les ha inculcado ese miedo desde bebés. Los odian..porque es lo que les han enseñado a sentir. Y ver tanta crueldad en unos niños...asusta.
Pero alguien tendrá que dar algún día ese primer paso. Tendrá que liberarse de los prejuicios que lo aprisionan, acercarse al otro y entablar el diálogo. Tendrá que practicar la comprensión y la empatía, y enseñar a sus hijos a hacer lo mismo.
Tendrá que comprender y perdonar. Y así generación tras generación. Hasta que llegue un día en que los rencores sean olvidados y todos juntos se unan en po de sus derechos, los derechos que todos tienen y comparten: sus derechos como personas.


1 comentario:

Isthar dijo...

La educación, los ideales y costumbres que nos inculcan desde niños es lo que permite que seamos gran parte de lo que somos. Si no se tiene forma alguna de comprobar si es el camino adecuado, una vez las ideas estan instaladas en nuestras mentes resulta casi imposible poder hacer algo por ser de otra manera. Es como estar condenado a ser lo que han hecho de ti.

Yo también espero el dia en que eso cambie, lo espero ansiosamente...